Mi padre suele decir:
algun dia de estos
cogere una de esas palomas
antes de morirme
atrapare una paloma al vuelo.
Suelo soñar con el
vestido de blanco
en la playa
paseando
por el lienzo
del horizonte mudo
corriendo tras las bandadas deshechas
en jirones freneticos,
haciendo sonar sus alas
como el caer del lastre
desde un navio celeste.
Su camisa es un roto
en el tapiz de la noche
sombra de lino solar
sobre las negras olas.
Huye del fotograma congelado
del fondo de aliento a olvido
alejando el paisaje
en busca de una de esas
malditamente rapidas palomas.
En la busqueda de
coger al vuelo
una de ellas
camina por el borde del oceano
sonriendo porque no pierde nada quien
esta siendo soñado.
Cuando despierto camino por las plazas
con dientes brillantes
y nervios agudizados
en un juego interminable.
Aun tenemos tiempo,
me digo,
para correr en vano.
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